Prometían viajes astrales, curaciones milagrosas, hilo directo con los espíritus, telepatía. pero sólo vendían 'ayahuasca', un potente alucinógeno de origen amazónico usado desde hace miles de años por los chamanes de las tribus americanas para sus ceremonias y que puede llevar a la muerte o a intoxicaciones con daños irreversibles. Los agentes se han incautado de 40 kilos de plantas alucinógenas con las que, según el Ministerio del Interior, podrían haber elaborado 40.000 dosis.