Con una velocidad de cierre de 324 kilómetros por hora, la mandíbula de esta hormiga se considera el apéndice animal más rápido conocido. Al contrario que otras hormigas, como las del género Odontomachus, la mandíbula no se cierra de golpe desde una posición abierta, sino que presionan sus extremos entre sí, acumulando unas tensiones que se liberan abruptamente cuando una se desliza sobre otra. El resultado sería algo así como un violento chasquido de dedos humano. De este modo pueden atacar a otros artrópodos aturdiéndolos.
|
etiquetas: hormiga , drácula , mystrium camillae , mordedura , mandíbula