Un marco rojo, una pantalla y dos piezas circulares blancas. Si Harry Potter necesitaba de su varita para hacer magia, a cualquier niño pequeño le basta una de estas pizarras a su alcance para quedarse picueto. Sin saber muy bien cómo, esos trastos sirven para hacer dibujos sin necesidad de tiza alguna.
|
etiquetas: pizarra magica , desguazando