Mary Bell nació el 26 de Mayo de 1957 en Newcastle-Upon-Tyne (Inglaterra). Desgraciadamente, no tuvo una infancia feliz, de hecho, no tuvo siquiera infancia. Su madre, Betty Bell, era una adicta a las drogas y al alcohol que consumía incluso estando embarazada de ella. Al nacer Mary, Betty intentaría deshacerse en numerosas ocasiones de su hija. La dejaba con los vecinos mientras desaparecía durante semanas, la intentó envenenar en mas de una ocasión, no la alimentaba e incluso la precipitó por una ventana.