Si sigues la actualidad del videojuego moderno, sabrás que Microsoft y Activision Blizzard han cerrado recientemente la transacción más escandalosa jamás realizada en el sector: la primera adquirió la segunda por un precio superior al producto nacional bruto de más de la mitad de los países del mundo. Me divierte infinitamente pensar que Activision puede haber vivido lo suficiente para establecer ese récord sólo gracias a Infocom, ese humilde fabricante de aventuras de texto de los años ochenta. ¿Cómo? Esta es la historia.

Este es un experimento para convertir Zork 1 en un juego multijugador. Hasta cuatro jugadores pueden explorar el Gran Imperio Subterráneo al mismo tiempo, interactuando con el mundo juntos o separados. A veces esto introduce nuevas soluciones a los rompecabezas. A veces, rompe el juego de forma hilarante. ¿Cómo se juega? Necesitas un cliente telnet y algunos amigos. Conéctate a multizork.icculus.org, inicia una partida y diles a tus amigos el código de acceso.

Zork es más recordado hoy en día por su orgullo que por su jugabilidad real. El académico Nick Montfort alaba sus innovaciones, pero lo califica como "un esfuerzo muy temprano y tosco" que "no es una obra maestra según los estándares actuales". Un crítico del siglo XXI señala que "no quiere nada más que verte fracasar, y no se preocupa demasiado por lo bien que te lo puedas pasar". La construcción del mundo del juego era un poco desordenada, ya que ponía robots junto a espadas élficas, rompecabezas de Alicia en el País de las Maravillas [...]