¿Se ha preguntado alguna vez, lector, qué clase de música sonaría en cada momento de su vida si tuviera su propia banda sonora? El cine y la televisión nos han acostumbrado a no poder concebir la imagen de un superhéroe sin una épica composición de fondo hasta cuando sale de su casa a comprar el pan, o a que el drama debe estar acompañado por una nota de violín tenida lo suficientemente aguda como para considerar a Farinelli un cantante barítono. Incluye vídeo
youtu.be/2M2D3MnQxbY