El calentamiento global y las crecientes interconexiones entre ciudades y ecosistemas favorece la expansión de estos insectos. El calentamiento global está favoreciendo que este insecto se esté extendiendo de forma imparable. El coste puede ser muy alto: las termitas cuestan ya actualmente más de 36.000 M € al año. Ciudades de todo el mundo, desde zonas tropicales como Miami, México, Sao Paulo, Lagos o Yakarta, hasta metrópolis templadas como Madrid, Barcelona, París, Bruselas, Londres, Nueva York o Tokio, podrían encontrarse con ellas.