A menudo, muy a menudo, todo el rato y en toda ocasión, hay algún político que, preguntado sobre cómo solucionaría él un problema, dice muy serio: Educación. Inmediatamente comprendo que ese político no tiene ni la menor idea de cómo solucionar ese problema. Habrán notado que el comodín Educación vale para cualquier intangible, desde la violencia doméstica al machismo entero, pasando por la ecología, la xenofobia, la ética o la lectura. Lo que quieran se soluciona o se implanta con Educación.