Las tormentas solares pueden cargar el suelo en las regiones permanentemente sombreadas de la luna (PSRs) cerca de los polos lunares, y posiblemente pueden producir ‘chispas’ que podrían vaporizar y derretir el suelo, tal vez tanto como impactos de meteoros. “Cerca del 10% de esta capa [PSRs] ha sido derretida o vaporizada por impactos de meteoritos” señaló Andrew Jordan. El regolito es un conductor de electricidad extremadamente pobre por lo que la acumulación de carga se disipa de forma extremadamente lenta. En español:
goo.gl/UKPT70