Javier Fernández doctor en nanobiotecnología, científico de la Universidad de Barcelona e investigador de Harvard, mantiene una investigación donde expone sobre las propiedades del quitosano; un material biodegradable que podría ponerle fin a la vida del plástico y abriría nuevas vías de investigación en medicina e impresiones en 3D. Fernández dio con las bases para crear el shrilk, una mezcla a base de quitosano encontrado en la piel de los insectos. Su fuerza duplica a la del plástico, es biodegradable y el 2do material orgánico más abundante