Los dueños de una pastelería de Irlanda del Norte tendrán que pagar 500 libras (554 euros) por “discriminación sexual”. Los hechos se remontan a 2014, cuando Gareth Lee entró en una pastelería y pidió una tarda con la imagen de Epi y Blas y un lema que los dueños del negocio, "profundamente cristianos" no quisieron aceptar.