"A medida que caminas por la ciudad, observa, anota y considera las circunstancias y el comportamiento de las personas a medida que hablan y discuten o ríen o se golpean". Este recordatorio fue escrito por Leonardo da Vinci, nada menos que para... sí mismo. El artista florentino, de cuya muerte se cumplen 500 años este 2 de mayo, era tan aficionado a tomar notas que siempre llevaba un pequeño cuaderno en su cinturón. Hay algo en Leonardo que hacía que, incluso mientras vivía, se creara casi como un culto a su personalidad".