Comic-Con de San Diego. Ese nombre evoca, en los fans más acérrimos de cómics, series y películas de aventuras, acción, ciencia ficción, superhéroes, fantasía y terror, un paraíso para los geeks, para los frikis, un lugar donde poder dar rienda suelta a sus obsesiones sin que nadie les juzgue ni les considere bichos raros. Ir allí, al Nerdvana, es el sueño de muchos fans no sólo en Estados Unidos sino, muy especialmente, de fuera del país.