Rachelle, una chica de 17 años aficionada al skateboard que vive a las afueras de New York, realiza un viaje de auto-descubrimiento, a través de su tabla. Intimidada por un machismo implícito, tanto en el skate como en su vida diaria, Rachelle tropieza con un grupo de chicas skaters, chicas con carisma y sin miedo. Éstas le muestran que su auténtico mundo está ahí fuera, un mundo de amistad verdadera, fuerza y pertenencia al grupo. “Hoy,” confiesa Rachelle al resto de las chicas.