El tránsito del comunismo al capitalismo en las antiguas repúblicas soviéticas tuvo un coste económico y social enorme. De 1991 a 1993 la producción de bienes y servicios se hundió un 20% en el conjunto de la antigua URSS, y en algunas repúblicas lo hizo en más del 50%. Menos conocido es que el volumen de la población rusa también se vino abajo (en 1991 era de 148,4 millones de habitantes, pero en 2008 había descendido a 142,7 millones) y todavía hoy es inferior a la de los últimos años de la URSS…