Me gusta el heavy metal. Aunque no todo, claro. Hay grupos o subgéneros que me horripilan, pero en general, como movimiento cultural, me resulta fascinante. Es revolucionario, excesivo, visceral, festivo, sorprendentemente profundo y, a menudo, desternillantemente ridículo. Historia del heavy metal es la hagiografía Spinal Tap del género que muchos de sus fans estábamos esperando. Y todas las referencias al batería de Metallica vienen acompañadas de un «SIÉNTATE LARS». Saber enciclopédico con un tono didáctico y divulgativo.