«Solo» seis expediciones han intentado hollar la cumbre del K2 en invierno, por el camino, innumerables sustos, «motines», campamentos volados literalmente por el viento, heridos y lamentablemente, un fallecido, Vitaly Gorelik, sufría congelaciones y no se le pudo evacuar del campo base en helicóptero debido al mal tiempo. Sin duda el reto de escalar el K2 cuando la climatología es más dura se ha convertido en el reto más ansiado. De momento el K2 gana la partida, veremos por cuanto tiempo.