Los premios literarios siempre son motivo de alegría, especialmente para el que los recibe. De este modo, podemos suponer que la alegría hoy se la ha llevado Enrique Vila-Matas al ser galardonado con el Premio Formentor de las Letras en esta edición de 2014. Y más alegría, si cabe, si nos enteramos que el premio está dotado con cincuenta mil euros que (me imagino) a todos nos vienen bien.