Dice Alberto Olmos (Segovia, 1975) que, si no fuese tan tímido, se vería haciendo monólogos subido a un escenario. Que sus artículos, al fin y al cabo, son comedia 'stand up', pero plasmados en dos o tres páginas llenas de mordiente —esto no lo dice él— y muy disfrutables —esto sí—. Cuenta que el mundillo literario editorial tiene mucho de pose, que dentro de la industria casi nadie lee, pero cuando parece que va a caer en el descreimiento absoluto acaba hablando de tal o cual libro ignorado por los grandes suplementos.