Ya de por sí, los caracoles en general son criaturas ciertamente extrañas. Pero en el caso del caracol de pie escamoso (Crysomallon squamiferum), un gasterópodo descubierto en 2003, a todo eso le debemos sumar otra cualidad, casi de superhéroe: emplea el sulfuro de hierro para formar un blindaje metálico. La concha, principalmente, contiene pirita, también conocida como el «oro de los tontos» y greigita. Debido a que la greigita es magnética, este caracol puede levantarse con un imán.