Jamás he entendido el no querer que un niño reciba educación sexual. Todo lo que me contaron en la escuela, fue como poner una compresa, cuando todas las compañeras teníamos ya la menstruación. Y fue ridículo.
No entiendo el pensamiento de "son demasiado pequeños". Los niños van a crecer, no cuando al padre le apetezca, sino cuando pase. Algunos niños crecen antes, otros son niños más tiempo. ¿Y no es mejor que tengan toda la información necesaria? ¿Que más vale demasiado pronto que demasiado tarde? ¿No es preferible tratar al sexo con naturalidad, para que si los niños tienen algún problema puedan acudir con total confianza a padres y profesores, en vez de estar haciéndolo a escondidas y solos?
Es más, creo que tenemos una educación sexual deficiente, que debería ir más allá de 4 charlas. Que se de muchas cosas, por ejemplo: cómo poner un condón, que la responsabilidad de no acabar embarazados o con ETS es de las dos partes que participan, de usar compresas y tampones y de que la menstruación no es algo de lo que avergonzarse, de lo que es el consentimiento y el respeto, de que en cualquier momento uno puede decir "no" aunque antes haya dicho "si", de respetar cuándo te dicen no y aceptar el rechazo, que no tener sexo no te convierte en un/a estrecho/a, y tenerlo en un salido/a (por no escribir insultos mayores), de cómo es el sexo seguro también para homosexuales, de cómo es una relación sana y no hacerte sentir mal por no querer perder la virginidad, de que no tener ningún tipo de deseo sexual no es malo. Y de un largo etcétera que me dejaré.
Y no, hablarles de sexo no hará que se vuelvan promiscuos, igual que hablarles de la homosexualidad no hará que lo sean. Pero si verán el mundo desde otra perspectiva, más completa e informada.
Pero es que además, el Pin Parental es para todo. Para cualquier cosa que vayan a hacer extracurricular en el centro, se ha de firmar el permiso. Aunque sea una representación en el salón de actos del Quijote. Y si se te ha olvidado firmarlo, o a tu hijo llevarlo, no va a ver el teatro, y estará con un profesor de guardia mientras el resto disfrutan del teatro. Ridículo. Es añadir burocracia que no va a solucionar nada.
Pero por poner más ejemplos, debería haber charlas de todo tipo. Sobre el calentamiento global, sobre campañas de reducir el uso de plásticos, sobre como la producción de carne de vaca provoca la mayor deforestación y contaminación del planeta, sobre la sociedad de consumo y la dependencia a los bienes materiales, sobre campañas antidrogas, seguridad cibernética, antibulling, sobre relaciones abusivas, sobre cómo leer etiquetas de alimentos y dietas equilibradas y un todavía más largo etcétera. Y no, hablarles de eso no les convertirá en nada. Pero quizás sean personas más conscientes con el medio que les rodea, y se preocupen más, no solo por lo que les afecta directamente, sino también a la gente de su alrededor.
Y no solo eso. Claro que el mundo está lleno de opiniones. Pero los niños han de ser seres autónomos e independientes, y ver puntos de vista distintos y acabar formando su propia opinión. Que si coincide con la de casa, perfecto. Que no coincide, perfecto también. Va a seguir siendo tu hijo.