—La vida es maravillosa, ¿no crees?
—Si, es la ostia. Ayer mismo, mis colegas y yo bajamos al rio, no pescamos nada, pero nos pillamos una buena. -Sonrió. Sara perdió un pendiente, estuvo como una hora buscándolo con la linterna, y nosotros mientras riéndonos, no de ella, simplemente reíamos. Al final no lo encontró, pero bueno, solo es un pendiente.
—Os lleváis bien, ¿no? Tu y tus amigos.
—Si, son los mejores. Siempre están ahí para echarnos unas risas. Siempre hemos estado juntos, haciendo de todo. En la escuela, el instituto, la Uni… En la primera borrachera, la primera resaca… Todos, juntos.
—Debe ser maravilloso, tener a personas así a tu lado.
—Si…
—Supongo que te apoyaban en todo, ¿no?
—Si, todo eran risas, te hacían sentir bien.
—Ya, pero, ¿estaban ahí? …
—Ya te he dicho que si, que…
—Cuando lo hiciste, ¿dónde estaban?, tus amigos.
—¿Que?, ellos no podían… No podían saberlo. Yo, lo hice sin mas…
—¿Sin mas?, no. Las cosas no se hacen sin mas. No estabas bien, pero nadie se preocupo, nadie insistió, nadie pregunto. Tu vida comenzó a derrumbarse, pero nadie se acerco, tan solo interpretaron el papel de amigos, siguiendo el guion…
—No, ellos no, no, ellos no podrían… -Brotaron lagrimas de sus ojos. Haberlo imaginado… Soy yo, yo soy quien esta roto, quien decidió hacerlo, los demás no tienen la culpa.
—¿Por que lo hiciste?
—No lo se…
—¿Por que lo hiciste?
—Ya he dicho que no lo se…
—¡¿Por que lo hiciste?!
—¡Mi vida no tenia valor! ¡Yo! No tenia valor… Por mucho que lo intentara, no podía hacer nada, lograr nada… Y cada vez me sentía peor, algo ardía dentro de mi. Cada mañana, cuando abría los ojos, todas esas noches de risas, todas esas noches de lagrimas… Nada iba a mejorar, ¿por que vivir una vida de sufrimiento, una vida sin valor?
—Eres un cobarde.
—¿Cobarde? …
—Si, eso he dicho, un cobarde.
—Es fácil juzgar el dolor cuando no eres tu quien lo siente, quien lo vive. ¿Quién eres tu para llamarme cobarde? ¡¿Quien?!
"La vida es maravillosa, ¿no?".
Anónimo