El debate sobre la prostitución ha vuelto a la actualidad. La creación de un supuesto sindicato de putas (en neolengua, trabajadoras sexuales) y la reacción de la ministra socialista al respecto ha puesto el foco sobre la situación de las putas en España.
La opinión parece inclinarse al apoyo a este sindicato de putas, tenemos que regularizar su situación para que no vivan en precariedad, que tengan los mismos derechos que tiene cualquier otro trabajador y las mismas obligaciones fiscales. Esta regularización las protege de las mafias y de los proxenetas, las libera y las convierte en emprendedoras profesionales al mismo nivel que un fontanero o un abogado.
Los argumentos son sólidos y bienintencionados, no se le puede reprochar nada a los que piensan de ese modo porque de verdad creen que les van a hacer un favor a estas putas que ahora mismo viven en la precariedad y el limbo administrativo.
Sin embargo, creo que conviene poner el foco por un momento en los que demandan estos servicios, en los puteros.
Pensemos por un momento en quienes son los clientes de estas putas, en cuales son sus valores, sus creencias. En qué cultura se han criado y por qué demandan putas. Pensemos en estos puteros, clientes de las mafias, de los proxenetas, de los barrios chinos, de las putas esclavizadas y obligadas a prostituirse.
¿Quién ha creado este sindicato? Una supuesta puta libre (según se define ella) que saltó a la palestra hace algún tiempo por crear una escuela para educar a putas novatas en el arte de atender a los puteros. Ella dice que es puta vocacional, que las mujeres son libres de ser putas y hacer lo que quieran con su cuerpo, que es libre de elegir ser puta.
Y ahora volvamos a los puteros, los clientes a los que van a satisfacer las putas formadas. Ya tenemos la escuela y el sindicato, ¿Se va a crear la organización de los consumidores del sexo? Una organización que defienda los derechos de los puteros a ser atendidos por putas profesionales, que puedan denunciar a una puta por mala praxis...
¿Se van a crear también perfiles laborales de putas en el INEM? Cuando vas a la entrevista del paro que añadan las habilidades necesarias para ser puta, que se den de alta los proxenetas y que demanden los perfiles de putas en las oficinas del paro. -Mire, señora Fulana, su perfil encaja perfectamente para ser una puta, vaya a la entrevista en el puticlub Paradise si quiere que le sigamos pagando el subsidio por desempleo-.
Tenemos que decidir, ¿Queremos una cultura de puteros? A las putas hay que ayudarlas, pero no lo vamos a conseguir ayudando a los puteros, tenemos los ejemplos en países europeos en los que esto se ha regularizado, las putas siguen siendo marginadas sociales en los Países Bajos y en Alemania y los puteros siguen viniendo a España a los clubs de carretera donde no creo que encontremos a ninguna puta que se afilie al sindicato de putas ni que vaya a cotizar como autónoma.
Mi propuesta, piensa en los puteros, los que salen beneficiados de la presunta regularización son ellos y los proxenetas que se lucran con el negocio de las putas.