Los miserables

Cuando fregaba platos sí podía ser de Podemos. Si consigo un buen trabajo, y tengo casa con jardín, ya no. 

En el fondo quieren que el hijo del fontanero sea siempre fontanero. El royo ese de "estudia, para tener las mismas oportunidades", es mentira, queréis pobres con hijos pobres.

Al señorito, al terrateniente, al pobre acomplejado y envidioso, siempre le molestará que las las clases humildes progresen. En las sociedades clasistas como la española, no se tolera que nadie sobresalga del burgo, cada cual debe estar a la altura de su estatus social.

En la política ocurre algo similar, no vale su desempeño ejemplar, sin tacha, sin corruptelas de por medio, se mira más lo personal, el ámbito privado, destaca el marujeo, la "Salsa Rosa", que tapa el plato infecto del día, otro caso de corrupción, como no, del Partido Podrido, son estos y su satélites, los encargados de enfangar el patio ibérico con cualquier pretexto, antes era Venezuela, pero ahora como no cuela... Caballero, es el turno del chalecito de Pablo Iglesias e Irene Montero.