Me fascina el derecho, se podría decir que en algún sentido lo amo, pero también odio su implementación práctica.
Al final quien realiza el derecho es un conjunto de personas, más o menos inteligentes, más o menos prejuiciosas, más o menos corruptas, más o menos íntegras, más o menos concienciadas, más o menos ignorantes y más o menos pasotas.
Se puede decir que en este país tenemos un estado de derecho, aparentemente tenemos las mismas instituciones democráticas y de derecho que cualquier país "avanzado"; pero ¿y tenemos también la voluntad de desarrollarlas?, ¿tienen los jurisdicentes la voluntad de que el derecho fluya correctamente?
O quizás el derecho para algun@s es una forma de vivir bien, una forma de cuando llegue la hora a casa que me voy y os pueden ir dando a todos, una forma de "hago como que hago" pero realmente me importa todo una mierda; y es que el derecho sin personas concienciadas "no fluye" y lo que tenemos al final es "pseudoderecho", una pantomima más o menos apañada llena de gañanes muy listos.
Al final tú puedes formalizar todo lo que te de la gana, hacer trípticos de concienciación, sistematizar todo lo que quieras, pero sin la voluntad humana todo eso se te va a caer (y posiblemente a mucha gente le va a dar igual), porque parecerá derecho pero no lo será, será una máquina grande y torpona dónde la persona se puede volver loca buscando un poco de eso que algunos llaman "justicia"...
A los jurisdicentes les diría: realmente os tomáis en serio lo que hacéis? os créeis el "sistema", o más bien usáis al sistema porque os viene bien? dicen que la pastita está muy rica...