Cataluña y el desastre que se cierne sobre ella

Primero de todo, avisar que soy catalán de tota la vida. Intento mantenerme al margen de las movidas unionistas e independentistas. Me abstraigo de ello y observo desde fuera. Las conclusiones que estoy extrayendo de esas observaciones me preocupan, y no son nada buenas.

Todos los pasos que se pueden dar, acabarán en desastre, y el único que lo evitaría no está sobre la mesa. Vamos a peor e iremos a peor. Las cargas policiales del 1-O dieron el motivo necesario para la desobediencia a aquellas personas que ya de por sí, querían desobedecer.

¿Qué pasos podemos esperar a partir de ahora? ¿Qué escenarios vamos a encontrarnos?

  1. Condena firme a los políticos presos: desastre. Ni los CDR ni el independentismo aceptará y asumirá una condena a los políticos encarcelados por el procés. Este caso llevaría a movilizaciones con altercados periódicamente.
  2. Aplicación del 155: vimos la repulsa por parte del independentismo cuando se aplicó. Una segunda aplicación elevaría exponencialmente esa repulsa, y por lo tanto provocaría movilizaciones y altercados por un buen tiempo.
  3. Convocatoria de elecciones en Cataluña:
  4. Ganan los independentistas: provocaría una carga de energía brutal a este movimiento y llevaría a más movilizaciones y más presiones hacia el estado.
  5. Gana Ciudadanos: el indepedentismo no aceptaría esta condición y se revolucionaría. Volveríamos a escenarios de grandes tensiones.
  6. Ilegalización de los partidos independentistas: este sería el escenario más terrible. Todos sabemos cómo acabarían las calles.
  7. Gobierno del PP en el Estado: siguiendo su última línea, volveríamos a un escenario tal como el punto 2, otra aplicación del 155.

Como véis, cualquiera de los escenarios planteados desde la política, provocaría más problema. Ninguno de los planteados serviría ni para solucionar, ni para rebajar tensiones. El único escenario posible para solucionar este percal es la convocatoria de un referéndum pactado. Escenario que no se contempla como solución.

No, no y no. El independentismo, a estas alturas de la película y tras cosas como las del 1-O, ni va a desaparecer, ni va a decrecer. Seamos sensatos. Esperar y mirar hacia otro lado no va a hacer cambiar absolutamente nada. Creo que en Cataluña se ha cruzado una líena de no retorno, y los escenarios venideros planteados por aquellos que deberían encontrar una solución al conflicto, no va a hacer más que complicar más el asunto.

#PrayForCatalunya