El Apóstol Santiago y el Camino, desde su inicio hasta el fenómeno de masas de la actualidad

El nacimiento y crecimiento del movimiento de peregrinos hacia la Tumba del Apóstol Santiago en Santiago de Compostela ha estado siempre rodeada por un aura de relatos en muchos casos de dudosa autenticidad debido a la fantasía que los rodea. En cualquier caso, la existencia de una catedral entorno a un sepulcro que ha promovido el nacimiento de la conocida Ciudad de Santiago de Compostela y el propio Camino de Santiago, que ha movido y mueve miles de peregrinos en los últimos siglos, es un hecho verídico.

Cómo llegó el Apóstol Santiago hasta Compostela

Los relatos de la época nos cuentan que tras la muerte de Cristo, sus apóstoles comenzaron a repartir la buena nueva a través de lo ancho y largo del mundo. Hasta tierras de España llegó el conocido como Jacobo en la biblia y actualmente más conocido como el Apóstol Santiago, cuyo nombre pasó del hebreo Ya’akov al latin Iacobus derivando a Santiago fruto de la unión de Santus Iacobus.

Cuenta la leyenda que Santiago junto con su hermano Juan eran dos de los Apóstoles que tenían más relación con Jesús. Hijos de Zebedeo y Salomé y presuntamente primos de Jesus (se cree que Salomé era hermana de la Virgen María), ayudaría a entender la privilegiada relación de Santiago con Jesus y las supuestas apariciones de la Virgen durante el viaje de predicación de Santiago por tierras de España.

Dichas apariciones se deben, según la leyenda, a la frustración que sufrió el Apóstol Santiago en su misión por España. Ya que no veía su objetivo cumplirse, la Virgen se le apareció al menos en dos ocasiones: en Zaragoza sobre un Pilar (de ahí la Virgen del Pilar) y en la costa gallega Muxía en una barca (de ahí la Virgen de la Barca).

Pero las apariciones no fueron suficiente y el Apóstol decide volverse a Jerusalén, con la mala suerte que a poco de su llegada es decapitado por orden de Herodes Agripa I el mismo que prohibió su entierro. Pero sus discípulos, que querían honrar a Jacobo, a escondidas durante la noche lo llevan en una barca mágica a enterrarlo a un lugar seguro.

Entierro del Apóstol Santiago en Compostela

La tradición cuenta que el lugar elegido para el descanso del Apóstol fuesen las tierras donde había predicado en Hispania. Llegaron con la barca sin tripulación ni guía hasta Iria Flavia, lugar conocido por el ser el primero donde predicó el Apóstol Santiago en Gallaecia (la actual Galicia). Atracaron en el puerto de esta ciudad y amarraron la barca a un pedrón (origen del nombre de la actual villa de Padrón) mientras solicitaban permiso a la reina del lugar, la Reina Lupa, para enterrar al Apóstol Santiago en sus tierras. Pero siendo ella pagana se negó, y en vez de ayudar a Teodoro y Atanasio intentó por todos sus medios que no lograsen su objetivo.

Una vez más, la leyenda cuenta que la Reina Lupa logró engañarlos con una supuesta ayuda de un carro de bueyes que llevase el cuerpo del Apóstol a un lugar seguro pero en vez de bueyes eran toros bravos. Sin embargo, y una vez más, milagrosamente, los toros se amansaron. Ante tales eventos milagrosos la Reina se convirtió al Cristianismo y les cedió el espacio para enterrar al Apóstol Santiago.

Aparición de la tumba de Apóstol

Sin embargo, aunque los restos del Apóstol yacían en lugar seguro no fue hasta varios siglos después cuando alcanzó la fama. Casi 8 siglos más tarde y de manera extraordinaria, el ermitaño Paio se alertó por la excepcional y maravillosa luminosidad de una estrella sobre el Monte Libredónque marcaba el lugar exacto donde se encontraba la tumba del Apóstol. De ahí el nombre de Compostela – Campus Stellae (Campo de las estrellas). Sería el propio Ermitaño Paio el que se puso en contacto con el Obispo de la misma Iria Flavia, Teodomiro, para informarle de tal evento. Tras la retirada de la maleza apareció, supuestamente, el túmulo del Apóstol Santiago junto con los cuerpos de Teodoro y Atanasio.

Inicio de las peregrinaciones a Santiago de Compostela

El Campus Stellae se encontraba bajo el reino galaico-astur y fue el propio rey del momento, Alfonso II el Casto, el que decide peregrinar hasta el lugar de los hechos para verificar la veracidad de los mismos. Siendo él, el primero de miles de peregrinos que visitan la tumba del Apóstol a través del actual Camino Primitivo, el más antiguo de todos los caminos hacia Santiago.

A partir de ese momento comienza la construcción de una iglesia entorno a la tumba, ya que se le proclama al Apóstol Santiago patrón del reino Galaico –Astur.

Es entonces cuando poco a poco, el Apóstol Santiago va logrando el objetivo principal que no había conseguido en vida: mover a miles de fieles por el cristianismo en este caso, promovidos por la peregrinación hasta su tumba motivados por la fe.

Es tal el auge y aumento de fieles que se le termina otorgando al Apóstol Santiago el papel patrón de España, ya que una vez más de manera milagrosa y con varias apariciones, aparentemente sobre un caballo blanco, hacen que poco a poco que los cristianos reconquistasen tierras españolas. Jacobo, Santiago Apóstol, pasa a ser conocido también como Santiago Matamoros gracias a su papel durante la reconquista cristiana en España.

Es desde entonces cuando Santiago de Compostela pasa a convertirse en uno de los mayores centros de peregrinación junto con Roma y Jerusalén. Aunque con el paso de los siglos las motivaciones para llegar a Santiago y los métodos para hacerlo hayan variado: ya no tenemos que ir y volver a pie! Ahora podemos llegar en avión, peregrinar y marcharnos como mejor nos parezca, no tenemos ni que tener motivaciones religiosas, basta con un solo motivo el que sea, para hacer nuestro viaje a Santiago de Compostela. El Camino de Santiago se puede hacer solo, en grupo, a pie en bicicleta o incluso a caballo. Se puede hacer el tramo del Camino que uno desee e incluso hay agencias de viajes especializadas en el Camino que te organizan todo para que tu solo tengas que preocuparte de disfrutar la experiencia.

Son variadas las razones por las que llegar a tal magnifico lugar y aquellos que bajan a ver la tumba de oro del Apóstol podrán o no creer que llegó en una barca mágica desde Jerusalén pero no se puede negar que gracias a él, podemos disfrutar de uno de los mejores itinerarios culturales europeos jamás conocidos.