Lo es, #3, porque las medidas a tomar son exactamente las mismas. Te recomiendo echarle un vistazo a la web del grupo Cielo Oscuro de Murcia: www.um.es/cieloscuro/ .
#35 Vayamos por partes.
Me alegro de que el PDF te sea de utilidad y te aclare las ideas.
Si se decidiera corregir el alumbrado público de una ciudad cualquiera, algunas luminarias habrían de ser cambiadas y otras bastaría con implementar las correcciones necesarias, además de adecuar los niveles de iluminación a las recomendaciones de la comisión internacional del alumbrado y sustituir las lámparas por aquellas que emitan toda su luz dentro del rango visible del espectro electromagnético.
Pongamos por caso las farolas de tipo globo sin apantallar, que desperdician el 70 % de la luz que emiten y apenas un 30 % llega al suelo. Para obtener unos niveles de iluminación adecuados utilizando este tipo de farola, no hay más remedio que elegir una lámpara más potente de lo deseable, más incluso si el globo es opaco. Lo correcto sería elegir un tipo de luminaria que enviase el 100% de su luz al suelo, sin difusores de ningún tipo. Con ello, la lámpara elegida bien podría ser de 100W o menos en lugar de 300W, por ejemplo.
Esto es aplicable a la foto. Al sustituir los globos por otras luminarias más eficientes, llega más cantidad de luz al suelo. Por tanto, para alcanzar esos niveles óptimos no sería necesaria tanta potencia. Otra cosa es que esos niveles máximos con los que se ve perfectamente sean multiplicados por dos o por tres sin ninguna razón de peso.
Entiendo que el autor de la fotografía se habrá sorprendido al tener que utilizar velocidades de obturación relativamente rápidas para sacarla. De todas formas, lo suyo sería medir los niveles de iluminación de esa zona para estar seguros.
#37 Los árboles, al igual que el resto de la flora, se ven afectados por la contaminación lumínica ya que continúan realizando el ciclo de la fotosíntesis por culpa de ella aunque el sol ya se haya ocultado en el horizonte.
#31 La contaminación lumínica no es parte del progreso. ¡Y punto!
Si las luminarias fueran como deben ser, en la fotografía sólo verías el aparcamiento y no los puntos de luz de las luminarias. Además, las lámparas emiten luz blanca. Así que, tanto si son de vapor de mercurio a alta presión o de halogenuros metálicos, están emitiendo parte de su luz en el ultravioleta. Esa zona del espectro no la podemos ver nosotros pero sí muchas especies de insectos o ¿nunca has visto una farola de luz blanca atraer mosquitos?
#29 Existen métodos para evitar su propagación excesiva. Por ejemplo, para las aceras y asfalto se pueden emplear materiales con albedos más bajos. Y, por supuesto, el problema quedaría minimizado si se respetaran los niveles máximos recomendados.
Al evitar que la luz vaya directamente hacia el cielo, reducimos la contaminación lumínica en su ámbito más local. Sin embargo, todos sabemos que las luces de las grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia se ven a cientos de kilómetros. Esos hongos de luz se generan por el efecto suma de todas las emisiones por encima de la horizontal de cada una de las luminarias de esas ciudades, de las zonas residenciales y de los pueblos de alrededor. Este fenómeno es aplicable a cualquier ciudad española en menor o mayor grado y va en aumento.
Por tanto, la única luz aprovechable es aquella emitida por debajo de la horizontal. El resto, o deslumbra peligrosamente o ni siquiera se utiliza.
#30 Sería lo deseable. Mediante el empleo de reductores de flujo se puede disminuir los niveles de iluminación fácilmente en aquellas zonas de menor tránsito.
#15 Sería cuestión de medirlo y comprobar si se exceden los niveles máximos recomendados. De todas formas, en tu mensaje dices:
<<El problema es que si quieres ver el suelo, tienes que darle luz que rebote contra el y vaya hasta tus ojos, pero también hay mucha luz que no llega a ningún ojo y se pierde en el espacio...>>.
Eso que describes es luz útil, no es contaminación lumínica. La luz que se desperdicia y se derrocha es aquella que se emite por encima de la horizontal, en zonas del espectro invisibles al ojo humano y en niveles excesivos.
#12 Los niveles de iluminación de nuestras ciudades superan con creces los niveles máximos recomendados por la comisión internacional del alumbrado. Todo lo que sea superar esas recomendaciones es tirar el dinero, no se mejora el alumbrado ni tampoco supone incrementar la seguridad de nuestras calles.
La privación de oscuridad no es buena para ningún organismo. Reducir la contaminación lumínica debería ser prioritario para nuestra salud y la de nuestros bolsillos.
Muy cierto. Yo me lo estoy planteando cada vez que cojo el coche por la noche. De todas formas, empiezo a estar un poco harto de que cualquier político de tres al cuarto diga que va a reducir la contaminación lumínica, sin tener ni idea de lo que es, proponiendo una serie de medidas que nadie va a contestar por puro desconocimiento. Se amparan en la ignorancia de la gente para cometer todo tipo de tropelías sin que nadie se plante.
Después de leer con atención todos los comentarios, me apetece dar mi opinión. #82: perder las estrellas es sinónimo de despilfarro, nunca de progreso. Por ejemplo, se podría reducir la contaminación lumínica apagando la iluminación de las urbanizaciones deshabitadas y el alumbrado ornamental de los monumentos. Evitar emitir luz por encima de la horizontal es fundamental para solucionar el problema. También se ha comentado que no se puede hacer nada con la luz reflejada y que se pierde hacia arriba. Eso no es así: para reducir la contaminación lumínica por reflexión se podrían emplear materiales menos reflectantes (menor albedo) en las aceras o en el asfaltado de las carreteras. Además, la contaminación lumínica también es la luz intrusa que entra en nuestros hogares procedente de la calle o los deslumbramientos que aguantamos cuando conducimos. Esos pájaros que no dejan de meter ruido a las tantas de la mañana o los árboles que continúan haciendo la fotosíntesis aunque el sol
ya se haya puesto también son víctimas de la contaminación lumínica. Y, por último, parece que ciertos estudios apuntan a que la contaminación lumínica podría jugar un papel importante en ciertos tipos de cánceres en seres humanos. Supongo que nadie me dirá que el cáncer es símbolo de progreso. En fin, para más información: www.celfosc.org .
#10 Las perseidas se verán siempre mejor cuanta menor contaminación lumínica haya. Aunque esto último será una utopía como no hagamos algo pronto. #15 Da igual la hora: en esos días habrá meteoros durante toda la noche en mayor o menor frecuencia, siendo mayor el día del máximo. No hay porqué aguardar a una hora determinada.
Se podrían tomar tantas medidas para reducir la contaminación lumínica mejorando la calidad de vida del ciudadano, pero parece que los políticos no están por la labor.
Con lo que sabemos por ahora de Apofis, #9, éste no caerá a la Tierra salvo que suceda algún imprevisto. En lo demás, estoy completamente de acuerdo: el peligro reside en toda esos millones de rocas de las que no sabemos nada. Habría que crear más programas de búsqueda de NEOs (es.wikipedia.org/wiki/Asteroides_potencialmente_peligrosos) para estar más tranquilos.
Apofis no supone ningún peligro. Es bastante cansino que aparezcan noticias de este calado cada poco tiempo cuando los especialistas ya lo han descartado como peligroso.
El ciudadano debe apretarse el cinturón mientras nuestras instituciones continúan derrochando a manos llenas. ¿Queremos reducir el consumo energético? Pues, ¡adelante! Empecemos por exigir un alumbrado nocturno suficiente, respetuoso con el medio ambiente, eficaz y eficiente desde el punto de vista energético.
Un tanto ingenuo el artículo del blog. La loable iniciativa llevada a cabo en Reikiavic es un ejemplo a seguir, pero también puede provocar más de un malentendido. Los que combatimos el despilfarro económico y el daño ecológico que causa la contaminación lumínica no estamos pidiendo que se apague el alumbrado nocturno, ni mucho menos. La iniciativa islandesa da pie a pensarlo. Lo que buscamos es, simplemente, un alumbrado eficaz que lleve la luz justa y necesaria al suelo. Ni más ni menos. Estamos hartos de luces intrusas, de ser deslumbrados mientras conducimos nuestros vehículos porque alguien cree oportuno instalar unos focos en un área industrial sin preocuparle las molestias que puede ocasionar a los conductores... Todo esto sin olvidar el ecosistema nocturno y la pérdida de los cielos estrellados.
Saturno es menos denso que el agua y flotaría si lo arrojásemos a un océano lo suficientemente grande. Y, sólo es un poco más pequeño que Júpiter. La noticia es curiosa, pero nada más.