#44 La queja de #41 no parte, en mi opinión, del hecho de que la mujer rehaga su vida, sino del hecho de que lo haga parasitando a quien fue su anterior pareja.
Cambiando de tercio: las alusiones a la pena de prisión para la maltratadora que se hacen en varios mensajes tienen su fundamento, seguramente, en el siguiente párrafo de la noticia:
"Después de este incidente, la acusada, según la Fiscalía, efectuó una llamada al teléfono móvil de su esposo para amedrentarlo diciéndole que se iba a autolesionar, que lo iba a denunciar y que le iba a quitar la custodia de su hija".
Eso de amenazarlo con autolesionarse, denunciarlo y quitarle la custodia de su hija constituyen muy serios indicios de jenaritis. De ese mal que aqueja a la Justicia, consistente en el uso con fines espúreos, egoístas e interesados de una ley que persigue otros distintos. Por eso piden la prisión para la mujer: porque ella estaba dispuesta a empapelar al hombre abusando de la ley. Es una mera cuestión de reciprocidad y no de ensañamiento.
#61 A ver, antes de que me vuelvan a llamar fanática o algo así, empiezo aclarando que estoy de acuerdo con tu comentario, y que mi voto negativo a la noticia no tiene nada que ver con estar o no de acuerdo, sino con el hecho de que realmente la considero amarillista e irrelevante para la portada de Menéame (#51, #56). Tengo muchas matizaciones que hacer a tu comentario, de todas formas, pero estoy muy cansada de que cada vez que estoy de acuerdo con la esencia de algo y matizo alguno de los puntos, la otra parte se radicalice, así que de momento creo que me lo guardaré para mi misma y no lo haré.
#59 Ya, bueno, entiendo esa protesta, pero el comentario de #57 es que "Lo triste es que esta chica NO entrará en prisión", no que la pena sea muy alta para los varones en determinadas condiciones.
#41 Por mucho que pueda doler, cuando se rompe una pareja, esto es inevitable y es algo que no le va a tocar más remedio que superar, porque lo lógico es que la otra parte rehaga su vida con otra persona: "ver como un extraño pasa mas tiempo con la que fue su mujer". Gran parte del daño que se hacen unos a otros en estos casos, y a las personas que están enmedio como los hijos y los amigos, viene porque alguno de los miembros de la pareja es incapaz de aceptar y superar esto.
Cambiando de tercio: las alusiones a la pena de prisión para la maltratadora que se hacen en varios mensajes tienen su fundamento, seguramente, en el siguiente párrafo de la noticia:
"Después de este incidente, la acusada, según la Fiscalía, efectuó una llamada al teléfono móvil de su esposo para amedrentarlo diciéndole que se iba a autolesionar, que lo iba a denunciar y que le iba a quitar la custodia de su hija".
Eso de amenazarlo con autolesionarse, denunciarlo y quitarle la custodia de su hija constituyen muy serios indicios de jenaritis. De ese mal que aqueja a la Justicia, consistente en el uso con fines espúreos, egoístas e interesados de una ley que persigue otros distintos. Por eso piden la prisión para la mujer: porque ella estaba dispuesta a empapelar al hombre abusando de la ley. Es una mera cuestión de reciprocidad y no de ensañamiento.