Al parecer a algunos el ENORME ARTE de este espectacular cartelista (oficio, por cierto, en vías de extinción) que cominó completamente casi dos décadas del mejor cine de Hollywood les parece irrelevante.
Vuestra vida sí que tiene que ser triste, hamijos. E irrelevante.
Vuestra vida sí que tiene que ser triste, hamijos. E irrelevante.