Después de provocar el caos, la confusión, el desorden, para que todo fuera a peor. Ahora resulta que esos provocadores, dan la culpa a los otros. Lo que quiere decir, lo subdesarrollados que son. Es decir, no tienen vergüenza, son indiferentes al daño que hacen. Pasan de todo, como si estuvieran fumando porros todo el día.
Y además, reclamando la justicia para atacar. Pero no consienten que usen esa misma justicia, para que los ataquen. Por eso, se han rodeado de jueces vasallos, con el estómago lleno, y los bolsillos repletos.
Por lo que, la esencia del juez y la justicia, no aparece por ningún sitio. Por lo que no son de fiar. Pues la justicia, la ley, no puede ser la verdadera.
Después de provocar el caos, la confusión, el desorden, para que todo fuera a peor. Ahora resulta que esos provocadores, dan la culpa a los otros. Lo que quiere decir, lo subdesarrollados que son. Es decir, no tienen vergüenza, son indiferentes al daño que hacen. Pasan de todo, como si estuvieran fumando porros todo el día.
Y además, reclamando la justicia para atacar. Pero no consienten que usen esa misma justicia, para que los ataquen. Por eso, se han rodeado de jueces vasallos, con el estómago lleno, y los bolsillos repletos.
Por lo que, la esencia del juez y la justicia, no aparece por ningún sitio. Por lo que no son de fiar. Pues la justicia, la ley, no puede ser la verdadera.
#5 Las heridas que ha producido las políticas nacionalistas -tanto la de los nacionalistas centralistas españoles, como los catalanes-, han producido una herida que con el paso del tiempo sanará.
Pero como la base del problema sigue siendo el mismo, no está resuelto: ocupación, invasión, corrupción, ladronería, con su brutalidad, humillación. Todo proseguirá igual.
Recordemos que la libertad, la autonomía, la independencia de las personas, es amor. Y el amor tiene la fuerza de lo nuevo, que parece débil, pero puede derribar y vencer a todo un imperio.
Es el juego del gato y el ratón. Si el gato no enferma y se debilita, el ratón no va a ganar. Por lo tanto, el ratón si es afortunado, el gato no lo matará. Pero seguirá siendo esclavo. Como una colonia, que la metrópoli explota, maneja, esquilma sus riquezas.
Hasta que tal vez, haya un estallido social, violento, una guerra, y la metrópoli salga, se vaya para salvar las vidas de sus miserables soldados. Pues, aunque los soldados, funcionarios, etc., se les haya lavado el cerebro, ser un invasor, un apestado, corroe y destruye la moral del invasor.
#73 En una revolución, llegado un momento no hay varias leyes. Sólo hay una: la de los revolucionarios y la de los que se oponen y los combaten por todos los medios posibles.
#39#36 El cambio, aunque superficial como siempre, ya está aquí. Pues la autoridad, ya no es como lo era antes. Ya hay muchas víctimas dañadas. Y eso demuestra que se está cambiando.
El perder el miedo es lo más difícil, pero lo más necesario para cambiar la situación de corrupción e inmoralidad. Que es mentir, falsear la realidad, para salirnos con la nuestra: vencer, obligar por la fuerza a los demás, para que hagan lo que no quieren, ni necesitan.
#39 Decir que un problema sólo tiene una causa. Es como decir, cuando alguien que tiene muchos años se muere, que la causa de la muerte ha sido una sola. Cuando llegado un momento, todo se conjuga para que una cosa, un acontecimiento, suceda.
Si somos capaces de saber que alguien es represivo. ¿hace falta que sea muy represivo para reaccionar a esa crueldad, brutalidad? ¿Por qué nos cuesta tanto responder, actuar radicalmente para descartar lo negativo, la corrupción, la inmoralidad, la maldad de los actos, decisiones? Sin los votantes, los políticos corruptos no podrían mandar como lo hacen.
Esa actitud es propia de alguien que vive de lo que vende a las personas. Que, tal vez, al ver que eso que uno defendía, a los corruptos crueles, al ver que las personas se han levantado en masa contra esos tiranos. Ahora recula para que, los que le compran lo que hace para venderlo, no se lo compren. El mismo acto de decir públicamente, que ya no va a favor de los corruptos, es un acto de márquetin.
Esa actitud es muy típica de escritores, cantantes, artistas, humoristas, directores de cine, dibujantes, pintores. Son personas, que para triunfar necesitan ponerse al sol que más calienta. Siempre a favor del poder, de los que mandan. Por lo que son vulgares, superficiales, corruptos, mentirosos. Es verdad que a esas personas se les ve tal cual son, en momentos de crisis, convulsos, revolucionarios.
¿Cómo sabemos que alguien es un dictador enloquecido? Por sus actos torpes, crueles, brutales, que él y su camarilla robotizada, lo justifican por la ley.
Pero, esa justificación no es válida. Pues los nazis también actuaban de acuerdo con su ley, que habían inventado para poder hacer lo que hicieron.
Por eso, todos los crueles, tiranos, ladrones, son sus actos quienes los describen y acusan, sin ninguna ley que lo diga.
¿Por qué uno es tirano, dictador? Porque quiere lo que no es de él. Por eso, como roba, o ha robado hace tiempo, ha de ser cruel, violento. Para, a pesar de robar, poder seguir como si no fuera ladrón, dictador, tirano. Pero eso, es como querer huir de la sombra que proyecta el cuerpo.
Los dictadores, tiranos, no tienen miedo a su pueblo, porque las leyes represivas, inhumanas, que han inventado les basta para dominarlo, con la colaboración de los diarios y televisiones. El dictador sólo teme a los países demócratas, que lo ven como un apestado, subdesarrollado.
#14 La ley que lleva al aprovechamiento del débil, a propasarse el poderoso que manda, que practica la corrupción, que es el mentir, el abuso de poder, ¿para qué sirve sino para el servicio de una casta de poder, que se instala, lavando los cerebros con palabras como patria, país, nación, siempre con la palabra ‘nuestro’ que las precede. Todos los ‘ismos’, si no generaran problemas con los otros ‘ismos’, no serían un problema. El problema llega, cuando hay rapiña, querer más y más.
Todos los regímenes más tiranos, sanguinarios, asesinos, también tenían sus leyes necesarias para legalizar sus maldades, sus matanzas. Pues el ser humano, tiene esa capacidad de inventar toda clase de justificaciones, para ponerse a salvo de las barbaridades que hace.
Pues su base desde donde operan, es la defensa de un enemigo. Por eso, ser justo, honesto, compasivo, es la raíz que nos trae la paz. Eso quiere decir, no robar, no ser opresor, ser exquisitamente no corrupto.
#4 Esos políticos no están ahí por arte de magia. Por tanto, los que los ponen en el poder con sus votos, son los últimos responsables de sus actos, corruptos, medio dementes, crueles, inhumanos.
Y todo esto, nos lleva a preguntarnos: ¿Por qué sucede toda esa dinámica de confrontación, de falsear la realidad, de mentiras, sabiendo que nos puede llevar al abismo?
Y entonces, la respuesta es: los conflictos de alto nivel, ¿por qué los países más poderosos, la Unión Europea, etc., consienten esa dinámica de mentiras, falsedades, infantiles, aunque ellos hablen de la ley, de economía, de lo favorable de la estabilidad del estatus quo?
El establishment es un club de amiguetes, como una mafia. Y sabemos cómo funciona: los amigos de mis amigos, son también mis amigos; y los enemigos de mis amigos son también mis enemigos.
¿Cómo no se va a quemar si siempre se pone en el infierno? Esa persona tiene algo de masoquista: odia a su enemigo a muerte, pero se besan en la boca por de noche. Haciendo tratos con los más ladrones, corruptos e inmorales. Con los más carcas, cazurros, subdesarrollados mentalmente.
Pero ese su destino: estar siempre quemado. Odiado por todos, excepto por sus fanáticos seguidores. Ya que esa persona, es un timo. Enciende una vela al diablo, otra a un santo, otra al dios de los no creyentes, al igual que al dios de los creyentes.
Y claro, lo que hace es el ridículo, con su superficialidad, banalidad, para estar en el poder de su nacionalismo, que es lo que le da votos. Aunque él dice que no. Que él tiene una fórmula mágica para resolver los problemas.
Pero en su ignorancia, no se da cuenta que, para resolver los problemas, no nos podemos identificar con nada, ser objetivos, imparciales. ¿Cómo puede haber imparcialidad, si se echa en brazos de los más fanáticos, subjetivos?
#29La revolución, para que lo sea, es lo que molesta al establishment, sea el de una persona cualquiera, o el de las instituciones, autoridades, los que mandan. Por eso, las revoluciones lo ponen todo patas arriba, donde nadie ni nada se puede ocultar. Y eso, lo puede hacer una pareja, un matrimonio, cualquiera, o una multitud, millones, de personas a la vez.
#28Para comprender la vida, cómo somos. se puede ver tanto desde el ámbito macro, como micro. ¿Por qué te quieres quedar sólo con lo macro, donde hay tanto ruido, tanta confusión y desorden?
Si vamos al ámbito de lo pequeño, cotidiano, sencillo -la parte micra de la vida-, puedes comprender qué es la verdad de las cosas que nos suceden, que suceden a todos los demás.
#26 Una revolución es lo más sencillo de hacer: si tú me cuestionas todo lo que digo, me rebates, describes mis puntos débiles, oscuros. Si puedes decir que soy corrupto, ladrón. Que formo parte de un patrón institucionalizado donde está lleno de corruptos. Si ofreces una alternativa a esa corrupción mía, ladrona, carca, cazurra, eso ya es una revolución en marcha. Aunque sólo sea una revolución contra mí.
Cómo se hubiera podido hacer la revolución bolxevique, y todas las revoluciones favorables a los pobres, los trabajadores, los oprimidos, los explotados, los esclavos. Si quienes se oponen, decían que no habian plenas garantías democráticas para hacer esas revoluciones.
Desde cuándo, para hacer una revolución, se pide permiso a los que mandan, a la autoridad. Si ella nunca dará ningún permiso. Por eso, toda la responsabilidad -vamos a decir casi toda- es de los que mandan. Primero por no darse cuenta, que su sistema, al ser injusto, es preciso que genere las protestas, la ira, la rabia, el odio, contra esa autoridad que parece incompetente. Y si no les hace caso, hace oídos sordos, cierra los ojos, llega la revolución.
Cómo se hubiera podido hacer la revolución bolxevique, y todas las revoluciones favorables a los pobres, los trabajadores, los oprimidos, los explotados, los esclavos. Si quienes se oponen, decían que no habian plenas garantías democráticas para hacer esas revoluciones.
Desde cuando, para hacer una revolución, se pide permiso a los que mandan, a la autoridad. Si ella nunca dará ningún permiso. Por eso, toda la responsabilidad -vamos a decir casi toda- es de los que mandan. Primero por no darse cuenta, que su sistema al ser injusto es preciso que genere las protestas, la ira, la rabia, el odio, contra esa autoridad que parece incompetente. Y si no les hace caso, hace oidos sordos, cierra los ojos, llega la revolución.
#19 Pero, ¿quiénes son los sentimentales, los nacionalistas españoles o los nacionalistas catalanes? Es preciso que sean los dos. Pues el nacionalismo es emoción, romanticismo del pasado y del presente, por creer que fueron y que son los mejores.
Eso mismo les pasa a los que viven en un pueblecito, una aldea, que se creen que viven en el mejor lugar del mundo. Y más aún, cada uno de nosotros, es un nacionalismo de sí mismo, que es su ego, su 'yo’, como europeo, africano, americano, ruso o chino, su cultura del lugar dónde ha nacido.
En cuanto al sentido común, todos decimos que lo tenemos. Por tanto, cada paso que damos para defendernos, si antes no se reconoce que uno también forma parte del problema, todo queda en un absurdo. Es decir, la confrontación, el conflicto, la violencia, la guerra y sus matanzas en masa.
La metáfora que he usado al basarla en una pareja, matrimonio, etc., no tiene ningún problema. Pues es aclaratoria. Ya que si comprendemos el problema, que tenemos todos los hombres, no hace falta investigarlos por orden de importancia, pues todos son importantes. Y todos se resuelven, por el mismo paradigma del amor.
#19 Pero, ¿quiénes son los sentimentales, los nacionalistas españoles o los nacionalistas catalanes? Es preciso que sean los dos. Pues el nacionalismo es emoción, romanticismo del pasado y del presente, por creer que fueron y que son los mejores.
Eso mismo les pasa a los que viven en un pueblecito, una aldea, que se creen que viven en el mejor lugar del mundo. Y más aún, cada uno de nosotros, es un nacionalismo de sí mismo, que es su ego, su 'yo’, como europeo, africano, americano, ruso o chino, su cultura del lugar dónde ha nacido.
#6 En todo eso que dices, hay una parte de razón. Pero eso mismo se lo puedes decir a los políticos, que quieren el centralismo decimonónico. De prebendas, beneficios, de ventajas en todos los ámbitos, de corrupción e inmoralidad. Si yo te prohíbo algo, que yo hago, soy inmoral, corrupto, estúpido.
Para que no llegue la violencia física, no se tiene que forzar a las personas para que hagan lo que no quieren. Es decir, si tú tienes un amigo, compañero, pareja, que ves que te perjudica, que envenena vuestra relación, y no quieres proseguir con esa relación. ¿Por qué esa pareja, compañero-amigo, te ha de prohibir, impedir por todos los medios, el fin de esa relación, perjudicial para los dos?
¿Verdad que parece una enfermedad mental, una obsesión, una idea persecutoria, un bullying sin escapatoria persecutorio inconscientemente o no, contra el que no puede seguir con esa relación?
¿Cuáles son los verdaderos motivos para impedir el cese de las relaciones entre las personas? Es preciso que sean de egoísmo con sus ganancias, económicas, sociales, algo inconfesables. ¿Podría alguien resistirse al fin de una relación, si ese que se opone tuviera pérdidas económicas, sociales, de pérdida de beneficios y prebendas?
En realidad, algo tan doméstico y cotidiano, tan favorable y adecuado para resolver los conflictos, agresiones, malos tratos, la violencia, matanzas, como es el divorcio, en pleno siglo veintiuno, todavía hay muchos millones que se resisten. Prohíben para que no sea en su esplendor y resuelva nuestros problemas.
Por lo que el motivo principal, es el no tener la capacidad, de deshacerse de los privilegios, de las ventajas mundanas, del poder de la mayor fuerza física, creerse que uno es el más poderoso, la mayor autoridad. Así que, todo es un problema de ignorancia, de ilusión infantil, de superficialidad. Al creerse que uno puede ir en contra de la verdad de lo que es la vida: la libertad, que es amor.
Ya que, si uno tiene amor a otro, no se quiere aprovechar de él, ni robarle, ni maltratarle, ni humillarle ni infravalorarle. Si no, al revés, hace las cosas, de manera para allanarle y ayudarle en lo posible su vida, en sus dificultades y problemas.
Si esa fuera la actitud del que impide que el compañero, la amiga, la pareja, se separe o divorcie, seguro que no habría violencia física.
¿Por qué cuando hay una gran desgracia, todos los que mandan se aprovechan, porque las personas están narcotizadas por el dolor, para hacerse auto propaganda, presentándose como si no fueran capaces de hacer daño, ser inmaculados demócratas, etc.?
Eso es toda una pose publicitaria. Porque la corrupción, la deshonestidad, las falsedades y las mentiras, prosiguen en ellos.
Es verdad que la política, es así. Pero la mayoría no saben, hasta dónde llega esa raíz. Pues sólo vemos algunos resultados negativos: los millones de parados, las pensiones miserables, la reducción de la calidad en la asistencia sanitaria, bajos salarios, los desahucios. Y toda clase de mentiras y falsedades.
Es tan haciendo como hacen todos los vencedores: ponerse ellos como los únicos buenos -como si fueran incapaces de matar y hacer daño-, y los otros presentarlos como si fueran los únicos malvados asesinos. Cuando en un enfrentamiento, un conflicto, una guerra, ambos bandos matan como pueden.
Todo lo demás, es no comprender la realidad, es hacer las cosas para sacar réditos políticos, para seguir en el poder mintiendo, falseando la realidad, de que en todo enfrentamiento los dos bandos hacen lo mismo.
Siempre que el vencedor en un conflicto, una guerra, ha conseguido la victoria, su trabajo consiste en presentarse como lo mejor, el orden, y los otros, los vencidos son lo peor, el desorden, el caos, la maldad.
Pero, en eso no hay paz, hay la dictadura del vencido. Por lo que, el enfrentamiento, la guerra, prosigue a otro nivel.
A los que les gusta tanto el pasado. ¿eso por qué es? Indudablemente es por negocio, por los beneficios que les reporta. Ellos, según el caso, lo envuelven de sentimentalismo, de romanticismo, de emoción. Y se contagian unos a otros, mutuamente,
El problema está, en que exigen a los demás que hagan lo mismo. Convirtiéndose en corruptos, dictadores, ayudados los poderosos del establishment. Que también, les interesa ese negocio de mirar al pasado, cuando se sacan beneficios.
Y además, reclamando la justicia para atacar. Pero no consienten que usen esa misma justicia, para que los ataquen. Por eso, se han rodeado de jueces vasallos, con el estómago lleno, y los bolsillos repletos.
Por lo que, la esencia del juez y la justicia, no aparece por ningún sitio. Por lo que no son de fiar. Pues la justicia, la ley, no puede ser la verdadera.