No conozco a la mitad de ustedes, ni la mitad de lo que querría, y lo que yo querría es menos de la mitad de lo que la mitad de ustedes merece. BILBO BOLSÓN
Esa es la competencia desleal, ninguna tienda puede competir con los que defraudan. Al final todo el comercio tradicional de barrio se ha convertido en chinos.