Esto me recuerda a una leyenda urbana que se hizo muy famosa durante la década de los noventa y finales de los ochenta. En ella, una mujer viaja de vacaciones y conoce a un hombre encantador. Pasan juntos unos días maravillosos disfrutando el uno del otro y, cuando la mujer regresa, el hombre le entrega un paquete regalo y le hace prometer que lo abrirá sólo cuando ya esté en el avión. Muy emocionada, ella acepta. Cuando lo abre, ya en el avión, se encuentra una rata muerta en avanzado estado de descomposición y una nota que dice: "Como ésta te vas a pudrir tú, zorra asquerosa. Bienvenida a la familia del SIDA".
Tenía también variante masculina. Un hombre (casado, según la mayor parte de las versiones) se hace el encontradizo con las mujeres en un bar. Una le hace caso, muchísimo, lo pasan muy bien y se van juntos a un hotel. Tienen una noche de sexo desenfrenado y él se duerme. Cuando a la mañana siguiente se despierta, ella ya no está, pero al ir al lavabo encuentra una nota escrita en el espejo con pintalabios: "A partir de ahora vas a pasar muchas noches solo. Bienvenido a la familia del SIDA".
Tenía también variante masculina. Un hombre (casado, según la mayor parte de las versiones) se hace el encontradizo con las mujeres en un bar. Una le hace caso, muchísimo, lo pasan muy bien y se van juntos a un hotel. Tienen una noche de sexo desenfrenado y él se duerme. Cuando a la mañana siguiente se despierta, ella ya no está, pero al ir al lavabo encuentra una nota escrita en el espejo con pintalabios: "A partir de ahora vas a pasar muchas noches solo. Bienvenido a la familia del SIDA".