Noticia curiosa pero sobretodo para hacernos reflexionar. Me parece muy despreciable aprovecharse de la debilidad de gente que está enferma por muy legal que sea este negocio. Habría que preguntar a los expertos si en España se hace lo suficiente para ayudar a este colectivo. Afortunadamente no me ha tocado cerca pero para las personas afectadas (familiares y amigos), en algunos casos, debe ser un calvario.