#35 No voy a retractarme en absoluto, me parece que la viabilidad de este proyecto es nula, al menos como se plantea en el artículo. Por desgracia no estamos ante el SpaceX español.
Personalmente, creo que una primera etapa debería ser de combustible sólido. Por simplicidad, fiabilidad y seguridad.
Parece ser que en España vende mucho vender oro, coger una subvención pública, montar un render 3D o una maqueta (para justificar el dinero público) y ponerle la bandera nacional. El proyecto tiene puntos muy flojos a simple vista. Además, en el artículo se mezcla este proyecto con el internet of things y la miniaturización de la electrónica, lo cual no tiene mucho que ver.
Si la ESA o la NASA, no mandan los nanosatélites con cohetes tan pequeños será por algo.
Las ideas tan brillantes de ir a contracorriente de lo que ya se hace actualmente, en un campo ya muy maduro como la cohetería, no puedan abaratar los costes de acceso al espacio por kilogramo.
#39 La verdad es que no he descubierto nada nuevo hoy
Es mejor plantearse objetivos alcanzables (tal vez un cohete de sondeo de 20 km de apogeo máximo?) que metas imposibles de alcanzar.
Con un cohete pequeño (la resistencia aerodinámica le afecta más aunque parezca contradictorio a primera vista) con mala combustión (la llama del vídeo parece el soplete de un taller), lanzando hacia el oeste (no parece que tenga mucho sentido no querer aprovechar la rotación terrestre), en una latitud elevada, tecnología no probada, legislación...
No hace falta ver mucho que este proyecto tiene poco futuro en cuanto a lanzar satélites.
Entre esto y el "coche volador español" (que ya salió en menéame), deja mucho que desear el futuro emprendedor de este país.
#5#6 Me sumo a vosotros. Me parece sorprendente que alguien quiera lanzar un cohete hacia al oeste, es simplemente absurdo.
En España, el mejor sitio para lanzar satélites son las Islas Canarias y no el Arenosillo.
Tal vez consigan hacer un cohete de sondeo suborbital, lo cual no está nada mal, pero esta gente no va a poner en órbita ni una piedra.
Lo siento por los inversores de este proyecto, no se dejen engañar por vendehumos.
Personalmente, creo que una primera etapa debería ser de combustible sólido. Por simplicidad, fiabilidad y seguridad.
Parece ser que en España vende mucho vender oro, coger una subvención pública, montar un render 3D o una maqueta (para justificar el dinero público) y ponerle la bandera nacional. El proyecto tiene puntos muy flojos a simple vista. Además, en el artículo se mezcla este proyecto con el internet of things y la miniaturización de la electrónica, lo cual no tiene mucho que ver.
Si la ESA o la NASA, no mandan los nanosatélites con cohetes tan pequeños será por algo.
Las ideas tan brillantes de ir a contracorriente de lo que ya se hace actualmente, en un campo ya muy maduro como la cohetería, no puedan abaratar los costes de acceso al espacio por kilogramo.