Rompo una lanza a favor y otra en contra de la UTE original.
A favor: Ese tipo de software personalizado para cada burocracia concreta es un infierno. Cualquiera que haya estado metido en un proyecto de ese calibre sabe que se va a pasar de presupuesto y tiempo y además le va a quemar generaciones y generaciones de informáticos que pasen por su empresa. Son proyectos malditos.
En contra: Manolete, si no sabes torear... pa qué te metes. O bien la UTE original no sabía lo que hacía (y entonces, ¿para qué te presentas?) o bien la UTE original sí sabía lo que hacía y vendió humo a propósito esperando alargar y alargar eternamente el proyecto... como finalmente pasó.
Y de regalo un consejo para las empresas o administraciones públicas que quieran hacer algo similar: Mejor ir por pasos, pequeñas metas. No licitar todo el proyecto del tirón. Y si podéis juntaros varios ayuntamientos y compartir código libre... os vais a ahorrar una pasta gansa.
A favor: Ese tipo de software personalizado para cada burocracia concreta es un infierno. Cualquiera que haya estado metido en un proyecto de ese calibre sabe que se va a pasar de presupuesto y tiempo y además le va a quemar generaciones y generaciones de informáticos que pasen por su empresa. Son proyectos malditos.
En contra: Manolete, si no sabes torear... pa qué te metes. O bien la UTE original no sabía lo que hacía (y entonces, ¿para qué te presentas?) o bien la UTE original sí sabía lo que hacía y vendió humo a propósito esperando alargar y alargar eternamente el proyecto... como finalmente pasó.
Y de regalo un consejo para las empresas o administraciones públicas que quieran hacer algo similar: Mejor ir por pasos, pequeñas metas. No licitar todo el proyecto del tirón. Y si podéis juntaros varios ayuntamientos y compartir código libre... os vais a ahorrar una pasta gansa.