#38 Solo anotar que no he dicho que grandes amigos míos sean mediocres, sino que les puede ofender que yo diga que están en un grupo o ambiente con muchos mediocres, porque la percepción de mis amigos puede ser que están en algo «más grande».
Lo de «convertir a Galicia en Holanda» queda muy bonito, pero no tiene chicha. Y a nadie le dice nada, fuera de a aquellos que lo dicen (porque les sirve para distanciarse de sus enemigos de la UPG).
No, no me apunto. Tanto por diferencias organizativas como ideológicas. Pero espero que tengáis suerte.
#36No estar de acuerdo con esto, salvando la típicas excepciones como Lores que confirman la regla, me llevaría a concluir que estas en la U y pierdo el tiempo hablando contigo. Yo con la U práctico lo de no alimentar al troll, soy así de radical.
Haces bien. Pero tranquilo, que no soy de la U.
En política la estética cuenta; modula, condiciona y da credibilidad al mensaje que trasmites.
Sí, la estética cuenta. Pero me parece que los que no están en la U cometen la misma ingenuidad por la que uno criticaba a Tierno Galván. Decía este crítico (no recuerdo el nombre) que Tierno creía que las señoras repipis, carcas y franquistas votarían a un socialista si este les hablaba de socialismo bien vestido, con su traje y corbata, como un «señor». La gente de la U suele ser tan impresentable, a simple vista, que los otros reaccionan haciendo orbitar todo sobre la cuestión de la presentabilidad, como si por tener una «estética juvenil», o «moderna», etc. fuesen a dotar de contenido y credibilidad a la «alternativa». Por eso el marketing político de los no-U se pierde en vacuidades y generalidades («un proxecto aberto», «unha Galiza moderna», etc.) El hecho de que los de +Galiza, EN, etc. no lleven gafas de pasta ni jersey de lana a lo «comunista rancio de los años 70», de que sus militantes sean más modernikis y peguen mejor en una discoteca techno, no quita que en ellos también haya mediocridad a raudales (lamento decir esto, porque puede ofender incluso a grandes amigos míos, pero es la conclusión a la que he llegado).
Y además del capital humano, existe el problema más estructural de que la evolución socio-demográfica que llevó al nacionalismo a sus mejores tiempos en los noventa, hoy apunta a direcciones distintas. El nacionalismo creció sobre todo entre la gente que nació en los 60-70-80, cuando estos eran jóvenes, debido a las transformaciones sociales de Galicia. Las circunstancias que dieron lugar a esta ideologización nacionalista en aquellas generaciones ya son parte del pasado, y no hay ninguna que favorezca un repunte ideológico del nacionalismo en los que vienen detrás. El nacionalismo político debería haber aprovechado esa oportunidad en su momento, pero el reto histórico, por lo que creo, le quedaba demasiado grande.
(No es que quiera desanimarte, al contrario, es algo que detesto, pero es como lo veo; y antes creía que valía la pena callar mis impresiones para dar una oportunidad al azar, pero ahora creo que está todo suficientemente claro como para no decirlo.)
Lo de «convertir a Galicia en Holanda» queda muy bonito, pero no tiene chicha. Y a nadie le dice nada, fuera de a aquellos que lo dicen (porque les sirve para distanciarse de sus enemigos de la UPG).
No, no me apunto. Tanto por diferencias organizativas como ideológicas. Pero espero que tengáis suerte.