Que bien, de verdad.
Así veremos si, desde el sillón de casa, somos capaces de clamar por las condiciones de trabajo en los campos de café, de té, de cacao, etc... y no volver a comprar nada de esta multinacional hasta que se haya arrepentido y resarcido a los niños del mundo a los que utiliza brindandoles educación, salud, etc.. a ver.
Así veremos si, desde el sillón de casa, somos capaces de clamar por las condiciones de trabajo en los campos de café, de té, de cacao, etc... y no volver a comprar nada de esta multinacional hasta que se haya arrepentido y resarcido a los niños del mundo a los que utiliza brindandoles educación, salud, etc.. a ver.