#5 He tenido la "Suerte" de trabajar en el Oceanográfico de Valencia. La ballena a la que te refieres, se llama Yulka. Es una beluga, y lo cierto es que desde que está en Valencia, ha mejorado mucho. Las compraron de un acuario que había cerrado. Yulka y Cairo (el macho) vinieron con depresión, además de llegar llenos de heridas y golpes. Estuvieron un largo tiempo en cuarentena, curándose. A la hembra, le costó menos que al macho adaptarse, porque es más joven que el macho. El macho se tiró mucho tiempo de espaldas a la gente, y solo se movía cuando cerrábamos el parque al público y lo mirábamos sin hacer ruido. Lo cierto es que siempre me dieron mucha pena porque el estanque en el que están es muy pequeño. También tengo que reconocer, que cuando pusieron a las morsas al lado de ellas, se volvieron un poco más "alegres".
Es muy difícil mantener a este tipo de animales como si estuvieran en libertad, porque principalmente falta espacio.
Agradezco la oportunidad que he tenido de haberlos visto tanto, durante tanto tiempo. De todos los animales se puede aprender algo, y yo he tenido la suerte de tener a muchos a los que mirar, pero si tuviera que elegir, entre poder ir a verlos o dejarlos libres para siempre, te aseguro que firmaría su libertad.
Podría contarte miles de histórias sobre ellos, pero tampoco quiero parecer una pesada
Te dejo una foto, para que te tengas un recuerdo más simpático de ella
Es muy difícil mantener a este tipo de animales como si estuvieran en libertad, porque principalmente falta espacio.
Agradezco la oportunidad que he tenido de haberlos visto tanto, durante tanto tiempo. De todos los animales se puede aprender algo, y yo he tenido la suerte de tener a muchos a los que mirar, pero si tuviera que elegir, entre poder ir a verlos o dejarlos libres para siempre, te aseguro que firmaría su libertad.
Podría contarte miles de histórias sobre ellos, pero tampoco quiero parecer una pesada
Te dejo una foto, para que te tengas un recuerdo más simpático de ella