Vodafone me llama a diario desde hace una década. A veces 3 veces el mismo día. Ni lista Robinson, ni petición de cese, ni me dan los datos, ni me dicen el nombre de la empresa de teleoperadores desde la que me llaman...
En otros casos no sé, pero en el mío los/as teleoperadores/as son cómplices de este acoso por no ofrecer la información que están obligados a dar.