Lo curioso es que en condiciones normales y no tan normales es más seguro volar con el combustible justo que con un extra de ¿seguridad?, sobre todo a la hora del despegue ya que el avión lleva menos peso. Quedarse sin combustible no es tan peligroso como un fallo en el despegue. Un avión moderno puede planear, y si el piloto es lo suficientemente hábil hasta aterrizar en el río Hudson.
Quizás el último accidente mortal de Barajas no hubiese sido tan grave con 100 litros menos de queroseno.
Quizás el último accidente mortal de Barajas no hubiese sido tan grave con 100 litros menos de queroseno.