Aquí vemos, todos los años, numerosos pasos, incluso muy pequeños, desmembrados por costaleros torpes, o atiborrados de fino...y allí, menudo equilibrio y ligereza, con semejante torre...
Un microestado sin líderes, en donde todos tienen voz y voto. En donde todo se decide por medio de asambleas. En donde cada cual aporta su trabajo en función de su capacidad y voluntad solidariamente.
Sí, es un sistema anárquico. Y como pueden ver, funciona de maravilla.