#38 Disculpa el tecnicismo! En este contexto, una cohorte de edad son todas las personas nacidas en el mismo año (1985, 1986, etc., puesto que todos van a recibir las vacunas del calendario que les corresponda a su edad por año de nacimiento.
Lo que se hace desde el sistema sanitario es aprovechar los contactos que tengan con nosotros por cualquier razón (desde un resfríado, a algo más grave) para proponerles la vacunación. Es lo que se llama una campaña pasiva, los sanitarios que trabajamos con vacunas sabemos esta información y la tenemos en cuenta. No hacemos una llamada activa a la población para que acuda por la misma razón que exponemos en el artículo: porque la situación no lo requiere, no hay mayor riesgo para ellos puesto que el virus no circula en nuestro país con suficiente fuerza y eso nos permite "relajar" (muy entre comillas, entiéndase la expresión) la medida.
Si en un futuro fuera necesario, pues cambiaríamos y llamaríamos públicamente a esa gente a vacunarse, pero afortunadamente no hay riesgo actualmente.
#30 Efectivamente, sucede que a) casi ninguna vacuna es efectiva al 100% y b) el sistema inmulógico de cada persona es un mundo.
Tenemos conocimiento suficiente para controlar incluso cohortes de personas cuya vacunación fue mas o menos eficaz, por eso sabemos (como ejemplo), que los nacidos entre 1985-88 y 1995-98 recibieron una cepa de vacuna triple vírica con una tasa de fallo alta y las recomendaciones es adimistrarles una nueva dosis de Triple Vírica. Es algo normal dentro de cualquier tratamiento, y las vacunas no se libran por desgracia, aunque hoy en día su eficacia es muy muy alta en la mayor parte de los casos
Lo que se hace desde el sistema sanitario es aprovechar los contactos que tengan con nosotros por cualquier razón (desde un resfríado, a algo más grave) para proponerles la vacunación. Es lo que se llama una campaña pasiva, los sanitarios que trabajamos con vacunas sabemos esta información y la tenemos en cuenta. No hacemos una llamada activa a la población para que acuda por la misma razón que exponemos en el artículo: porque la situación no lo requiere, no hay mayor riesgo para ellos puesto que el virus no circula en nuestro país con suficiente fuerza y eso nos permite "relajar" (muy entre comillas, entiéndase la expresión) la medida.
Si en un futuro fuera necesario, pues cambiaríamos y llamaríamos públicamente a esa gente a vacunarse, pero afortunadamente no hay riesgo actualmente.