El viernes pasado fui al SEPE (oficina empleo) a llevar unos papeles, me tocó el funcionario borde, uno de los fórmularios no estaba relleno y empezó a faltarme el respeto, sin gritar, con educación y una sequedad inmensa le pedí que no volviera a faltarme el respeto, le dije que tras la cita, quería hablar con su superior...
!!! Magia!!! Como un corderito y suave como el papel higiénico para las hemorroides.... Pidió mil disculpas y se dedicó a realizar su trabajo ( que le recordé, pagamos entre todos, un servidor incluido ) .
Pd. El funcionario de la mesa de al lado me miraba con simpatía y aprobación, parecer que éste funcionario faltaba el respeto en demasiadas ocasiones. Algo que pude comprobar cuando en lugar de pasarle un papel al compañero, se lo arrojó sobre las manos mientras tecleaba y siguió a "lo suyo", menudo elemento que tenían que aguantar , los compañeros, y nosotros.
No.
Son los gaviotos.