En mi centro universitario (Ingeniería informática) se matriculan sólo un 14% de mujeres. La proporción de profesoras es algo mayor, pero en unos años, al paso que vamos, será del 15%. No sé cómo quieren que haya paridad, si las mujeres no quieren estudiar esto. Lo curioso es que nadie sabe la razón de estos números. A principios de los ochenta, aproximadamente el 50% de los estudiantes eran mujeres.
Yo solo se que mientras un tábano le está chupando la sangre a un caballo, apenas mueve un poco la piel y muchas veces ni eso, ni intenta quitárselo. Te puedo asegurar que un mordisco de un tábano no es como para no moverte.
#151 Sólo tú y #147 saben lo que es una cátedra en este contexto. Nada que ver con una plaza de catedrático. Dos comentarios de casi 200 que saben de qué se habla.
Que triste.
Cuanto experto.
#41 Totalmente cierto. Del tema en concreto de mi tesis, nadie del tribunal podía llegar a mi nivel y no es que esté vacilando, es que es así como debe de ser. Por eso, normalmente las preguntas suelen ser transversales, planteado relaciones entre lo tuyo y otras cuestiones. Nada por lo que preocuparse. Fue el mejor examen de mi vida. Disfruté mucho.
Independientemente de ir en bici o andando, una trampa de clavos de 15 cm. En el suelo es muy peligroso para todo el mundo. Casi más para los senderistas. No entiendo cómo se discute sobre bicis y senderistas. Todos estamos en peligro con las trampas de clavos y están dirigidas a ambos, sin excepción.
Tiempo muy ajustado, varias versiones de examen de dificultad equivalente que se asignan aleatoriamente de problemas o desarrollo de casos, respuesta escrita a mano, foto con el móvil y subirla a la plataforma. Poco, muy poco margen queda para el fraude. Si me apuras, menos que con el sistema clásico presencial.
La única vez que se hizo caso a los técnicos en algo fue cuando la amenaza del efecto 2000 en los sistemas informáticos. Se gastaron millones en prevención y eso evitó el desastre. La diferencia es que entonces era dinero lo que había en juego y claro, eso era primordial para las grandes compañías. Luego la gente dijo que no era para tanto la amenaza, pero no saben el dineral que se invirtió en ello.
#101 A mí me encantaba el Simposio Internacional de Material de Oficina en los años 70: era alucinante ver clasificadores de papeles mecánicos, plotters de mesa, gomas de borrar eléctricas, mesas de delineante con paralelos increíbles, sillas y mesas de formas extrañas, tubos neumáticos de mensajería y algún ordenador.
No, los catalanes nunca han sido antisemitas. En la Edad Media ya eran seres de luz.
Revuelta anti judía de 1391 (de la wikipedia):
“Las matanzas de judíos se extendieron a otras ciudades, primero del valle del Guadalquivir (Córdoba, Andújar, Montoro, Jaén, Úbeda, Baeza, etc.) y luego de la Meseta Sur (Villa-Real -hoy Ciudad Real-, Cuenca, Huete, Escalona, Madrid, Toledo -18 de junio-, etc.) y otras zonas castellanas (Burgos, Logroño -12 de agosto-, etc.) y de la Corona de Aragón (Valencia -9 de julio-, Orihuela, Játiva, Barcelona -5 de agosto-, Lérida -13 de agosto-, Mallorca, etc.) “
La religión es inherente al ser humano. Da los mismo los papas de Roma o la serpiente alada o Shiva. Lo jodidamente cierto es lo que implica en cuanto a los listos que sacan partido de eso, como ve ve en este artículo. Ahora tienes a individuos perfectamente ateos que son capaces de matar o morir por religiones alternativas como su equipo de fútbol, con sus templos (estadios) y su liturgia de los domingos (partidos), con sus santos (jugadores) que ganan millones a costa de sus fieles. Y no sólo me refiero al fútbol. Ya sabéis de que hablo: política, capitalismo, ecologismo...
No, no tenemos solución.
He leído dos veces “La inesperada madurez de LA IGLESIA y sus ministros” y he pensado que no es inesperado que los curas sean cada vez más viejos.
Vivo de milagro...
#70 Los alumnos que nos entran en la universidad desde módulos superiores de formación profesional de informática , además de que se les convalidan asignaturas de primero o segundo, son excelentes en cuanto a interés y ganas de aprender. Conocen el oficio y tienen claro lo que quieren y eso incluye que son conscientes de las dificultades con las asignaturas de matemáticas y dan el callo a fondo.
El problema está en los nuevos y sus falsas expectativas. Le cuesta mucho asumir que desarrollar software requiere mucho esfuerzo, tesón y paciencia. Vienen pensando que el primer año van a ser capaces de reventar El Pentágono o hacer un videojuego para Play o PC.
La falta de madurez de los chicos y chicas nuevos es preocupante; protestan por cualquier dificultad o les resulta un drama que les toque el turno de tarde. No se dan cuenta que se están formando para ser profesionales y quieren seguir con su vida de instituto. Es difícil tener que bregar con esa actitud.
Por último, la presión que tenemos en cuanto a las tasas de éxito, es decir, a cuánta gente aprobamos, hace que el nivel se esté reduciendo año tras año. Actualmente no puedo poner un examen de bases de datos de los que ponía hace sólo quince años. No aprobaría ni el 30%. La gente sigue siendo tan lista o torpe como siempre, pero la evaluación continúa los lleva a conseguir mini objetivos académicos. Tienen mini exámenes cada semana y eso se traduce en un aprende-y-olvida, ya que en muchos casos no tienen un examen global. No son proactivos y no aprenden a planificarse a más de una semana.
Todo muy triste y peligroso.
#3 Las pantallas transparentes que salen tanto en las películas permiten primeros planos de frente del actor mientras está haciendo sus cositas informáticas que se ven al mismo tiempo. Es tan absurdo como cuando en los diálogos en teatro los personajes empiezan a hablar de cara al público, en vez de cara a cara.
Soy Jefe de estudios en un centro universitario. Mi escuela imparte seis títulos de grado, cuatro de máster y un programa de doctorado. Tenemos unos 1600 estudiantes y 120 profesores. La queja que más entiendo de esta directora de centro es la que se refiere a estar todo el día apagando fuegos sin tener tiempo de sacar adelante trabajo efectivo. Ojo, que apagar fuegos puede ser referentes a problemas que no son de la escuela, lo son de los estudiante. Y grandes. Los casos más comunes son de alumnos que les ha tocado un turno que coincide con su horario laboral, o que tiene que cuidar de abuelos o hermanos pequeños o que no tienen transporte público. Es duro cuando no se lo puedes resolver porque ya no hay espacio en los laboratorios. Es un trabajo frustrante, pero alguien tiene que hacerlo. El asunto es que hay que tomárselo así; es lo que hay. En caso contrarío te puedes hundir.
Por otro lado, la infantilización de los estudiantes universitarios hace años que la tenemos muy asumida: Chicos y chicas que vienen con sus papás a hablar conmigo y que tengo que hacerles entender que sus hijos son mayores de edad y que no puedo informarles de sus notas o actividades sin el consentimiento explícito por escrito de sus hijos. Sin mencionar el AMPA extraoficial que se montan (sí, sí, tienen grupo de whatsapp) y que me escribe correos con exigencias académicas.
Caso aparte es el tema del sistema de calidad y toda la burocracia asociada, pero eso no es más que trabajo aburrido, que tampoco es para llorar.
Menos mal que aún tengo mis clases; espacios de dos horas en las que disfruto de verdad.