Pues para ponerte un pendiente en la oreja si eres menor de 18 años necesitas una autorización firmada por los padres. Las cosas de este país, uno de estos dos casos está mal planteado y seguramente lo están los dos
Yo he tenido un par de experiencias con " patriarcas". Mi mujer tenía una farmacia en un barrio muy humilde madrileño de mayoría gitana. La farmacia llevaba, lleva funcionando desde los años 50, fue mi suegro quien se estableció allí. Era el único comercio que había y había una máxima " la farmacia no se toca". Pero hace mas o menos una década eso cambió. A las nuevas generaciones les daba igual , amenazaban, robaban ....uno especialmente nos tenía amargados por su violencia. Un día nos destrozó el despacho y porque la farmacia estaba blindada, ( manda cojobes en el siglo XXI). Otros vecinos nos aconsejaron hablar con el " Patriarca" del barrio y así lo hicimos, bueno lo hice yo porque las mujeres no cuentan. Después de pasar por el ritual exponer la situación y aguantar todo tipo de comentarios semiracistas y machistas se decidió desterrar al individuo ya que además había cometido otros desmanes en el barrio.
Pues ni puto caso al Patriarcca ni destierro ni leches y además la familia, que todos son familia, mirándonos mal. Lo que nos salvó esque le cayeron 20 años por asesinato.
En otra ocasión atracaron a mi hijo cuando estaba cerrando, ya en la calle, consiguió huir pero le arrebataron el móvil y las llaves de la farmacia. Evidentemente hubo que cambiar todas las cerraduras. Lo curioso es que al día siguiente uno de los atracadores vino a devolvernos las llaves y el móvil no sólo nos lo devolvió sino que nos pidió perdón, pero perdón sincero porque estaba superacojonado. Lo que había pasado era que el que mandaba de verdad en el barrio, no el patriarca, les obligó a ello. Cuando tube ocasión le dí kas gracias y me dijo que no llamase más a la policía, que eso no es bueno para el negocio ( drogas). Total que el buenísimo y el desconocimiento de la realidad hace que estemos como estamos
Trabajo en Leganés, hace años solía desayunar en un bar de la zona. Comenzaron a realojar familias gitanas en el barrio y frecuentaban ese bar. Un día se sentaron a mi lado una familia, uno de los integrantes , el más joven, estaba despotricando contra otra familia diciendo que si les iba a hacer esto o lo otro por no sè que problema, mientras los demás lo jaleaban la abuela, la matriarca, dio un golpe en la mesa para imponer cordura, explicando que eso no era buena idea, que los susodichos tiraban de navaja y que se podía montar una gorda entre las familias. Hablaba la voz de la experiencia, de la sabiduría acumulada por los años y sentenció: " SI quieres desahogarte busca a cualquier payo y le pegas una paliza".
En ese momento miré al dueño del bar y nos comunicamos con la mirada, telepáticamente
-— Que marrón
— ya te digo
— No creo q vuelva más por aquí
— lo entiendo perfectamente