#10 Y luegon dicen que fue una gierra entre hermanos. Y una mierda.
Fue un golpe de estado que salió mal y para endulzar lavar y blanquear un genocidio ideológico se inventaron la guerra entre hermanos que era una cosa muy romántica y la iglesia que participó en la matanza apoyó en toda la dictadura este relato…
Andalucía tiene un nivel muy bajo en todos los aspectos importantes en la vida de un ciudadano del siglo XXl y la religión es uno de ellos, esa imagen que dan más propia de países musulmanes con las fiestas religiosas es de un fanatismo atroz.
Sobre un carro, un carro de ruedas destartaladas y ejes que chirriaban, a contraluz con la estepa iluminada eternamente, llevamos ayer su cadáver a Motorowo, y en su jardín, la cabeza hacia España, lo enterramos... Con él se fueron las medallas religiosas, el cisne blanco en la camisa azul, y aquellas rosa de los Alpes que una estudiante alemana le regalara. Nos dejó, sin embargo, una antología de la buena muerte y una postura arrogante ante lo irremediable. Caía la tierra sobre su cuerpo y descendía sobre nosotros el afán silencioso en la lucha. Así, sin gritos, proseguíamos, cada vez más acelerada, la marcha hacia los límites de nuestra conciencia. Se desangran, sí, los cadáveres de los falangistas, pero esa sangre entra en las venas de los que nos quedamos, para rejuvenecer nuestro ímpetu.
Todo esto no es más que la consecuencia de la importación de limones de otros países y los pequeños agricultores haciendo de negreros a las grandes superficies