Esto es lo más triste. Hasta los cojones estoy de leer y escuchar que España es una democracia donde rige el estado de derecho y la separación de poderes es real. Hasta los cojones estoy.
España no es Arabia Saudí, ni Sudán, ni Corea del Norte ni Venezuela. Hasta ahí llegamos todos.
Pero un país donde un presidente roba, se demuestra que roba y ni dimite ni se le procesa, no es una democracia.
En un país donde a algunos les cae todo el peso de la ley y otros disfrutan de una fiscalía defensora no rige el estado de derecho.
En un país donde el gobierno no responde por sus actos, los jueces son escogidos a dedo, son reprobados o inhabilitados cuando intentan ser completamente independientes y donde la fiscalía y las fuerzas y cuerpos de seguridad actúan al servicio de la política y no de la ley y la Constitución, la separación de poderes no es más que un chiste de mal gusto.
Y el cuarto poder, fundamental en cualquier democracia, el periodismo desaparecido que debe informar a la población verazmente, sin ocultar noticias ni manipular información, es el ejemplo más claro y elocuente de que España es un país de mierda.
Y lo dice alguien que se siente español. Más español que muchos patriotas que se creen españoles por llevar una bandera o gritar contra los catalanes. Alguien que no va a aceptar lecciones de patriotismo de algunos a los que les da igual el sufrimiento de sus conciudadanos. Alguien que se siente tan español que no le da vergüenza admitir la basura en la que se ha convertido su país.
Hasta los cojones estoy.
España no es Arabia Saudí, ni Sudán, ni Corea del Norte ni Venezuela. Hasta ahí llegamos todos.
Pero un país donde un presidente roba, se demuestra que roba y ni dimite ni se le procesa, no es una democracia.
En un país donde a algunos les cae todo el peso de la ley y otros disfrutan de una fiscalía defensora no rige el estado de derecho.
En un país donde el gobierno no responde por sus actos, los jueces son escogidos a dedo, son reprobados o inhabilitados cuando intentan ser completamente independientes y donde la fiscalía y las fuerzas y cuerpos de seguridad actúan al servicio de la política y no de la ley y la Constitución, la separación de poderes no es más que un chiste de mal gusto.
Y el cuarto poder, fundamental en cualquier democracia, el periodismo desaparecido que debe informar a la población verazmente, sin ocultar noticias ni manipular información, es el ejemplo más claro y elocuente de que España es un país de mierda.
Y lo dice alguien que se siente español. Más español que muchos patriotas que se creen españoles por llevar una bandera o gritar contra los catalanes. Alguien que no va a aceptar lecciones de patriotismo de algunos a los que les da igual el sufrimiento de sus conciudadanos. Alguien que se siente tan español que no le da vergüenza admitir la basura en la que se ha convertido su país.