Leyendo esto, siento que soy rara. A todos parece gustaros, pero viéndolo, a mí no. Me parece enfermizo, desagradable... sucio. Para mí, en una escena, si no hay humor... no puedo sentirme identificada, y por lo tanto, no me produce excitación, sino repulsión. Supongo que por eso me gusta tanto el porno de los setenta-ochenta, donde había historia y la mayoría eran desenfadadas o divertidas. En el momento que el sexo se tiñe de problemática, no soy capaz de desligarlo y me causa rechazo.
¿Que qué me pone a mi? La risa. La escena "sexual" de Ace Ventura, me "gusta" muchísimo. Me da igual que no se vea nada, sólo la mirada de Ace tan cargada de pimienta, hace que me ardan las orejas. El strip-tease de John Cleese en Un pez llamado Wanda, o su tórrido beso también con Jaime Lee Curtis mientras ella lo desnuda en Criaturas feroces.... buf... O Florentino Fernández trabado sexualmente con Miriam Díaz Aroca en Isi-Disi Amor a lo bestia, y diciéndole a la policía que le gusta, que por favor no le mire, pero no porque le dé vergüenza, sino porque se excita más y es peor... ¡Dios, qué risa; cómo me puso esa escena! O Benoît Poelvoorde venciendo su enfermicísima timidez para besar a Isabelle Carré y acabar haciendo el amor con ella en Tímidos anónimos, ¡está para comérselo!
Para mí, el sexo es picardía, es humor, es risas, cosquillas, timidez vencida, vergüenza perdida entre mejillas coloradas y carcajadas de taparse la boca con las dos manos... No concibo un sexo aburrido, problemático, doloroso o con lágrimas. Dadme risas.
¿Que qué me pone a mi? La risa. La escena "sexual" de Ace Ventura, me "gusta" muchísimo. Me da igual que no se vea nada, sólo la mirada de Ace tan cargada de pimienta, hace que me ardan las orejas. El strip-tease de John Cleese en Un pez llamado Wanda, o su tórrido beso también con Jaime Lee Curtis mientras ella lo desnuda en Criaturas feroces.... buf... O Florentino Fernández trabado sexualmente con Miriam Díaz Aroca en Isi-Disi Amor a lo bestia, y diciéndole a la policía que le gusta, que por favor no le mire, pero no porque le dé vergüenza, sino porque se excita más y es peor... ¡Dios, qué risa; cómo me puso esa escena! O Benoît Poelvoorde venciendo su enfermicísima timidez para besar a Isabelle Carré y acabar haciendo el amor con ella en Tímidos anónimos, ¡está para comérselo!
Para mí, el sexo es picardía, es humor, es risas, cosquillas, timidez vencida, vergüenza perdida entre mejillas coloradas y carcajadas de taparse la boca con las dos manos... No concibo un sexo aburrido, problemático, doloroso o con lágrimas. Dadme risas.