#69 Y "por que es una porción", con el "por que" junto; y resulton con tilde en la o, poligonos con tilde en la i, y tio con tilde en la i. Por no hablar de la puntuación.
#61 Cierto, también lo miré hace un rato, por curiosidad, y me quedé con las patas colgando. Hay que ver cómo se deforma el lenguaje, cuando nos da la gana.
#2 Perdón por la impertinencia, pero cuando dices bodorrio creo que te refieres a la palabra bodrio. Un bodorrio lo tengo entendido por una boda por todo lo alto. Por lo demás, estoy de acuerdo contigo. Desarrollar ideas que la película no deja claras sería muy interesante.
Vaya indeseables. No son más que gentuza, esa es la verdad. Y encima se cuidan de que su podrido cerebro perdure en el tiempo, a fuerza de pudrir el cerebro de un niño. Qué bien, qué valientes, se les recordará para siempre en la memoria de los hombres como gentuza y locos y asesinos. Qué hartura de personas. ¿Personas? Sí, lamentablemente el ser humano es capaz de estas y otras barbaridades. Por suerte, también es capaz de grandes bondades, cosa que estos cerdos locos no aciertan a imaginar.
#0 La aparición o ausencia de tilde en el verbo inicial cambia por completo el sentido de la frase. Tal y como está escrita, el sujeto aparece en primera persona (es decir, yo); pero si se agrega una tilde a la o (intentó), el sujeto pasa a ser en tercera persona (es decir, él). Obviar la tilde obliga al lector a modificar la idea concebida tras el primer vistazo a la frase, y releerla para entenderla correctamente.
Por otra parte, las frases se inician con mayúscula; un punto y aparte se separa de la siguiente palabra; entre "a su novia en" y "acto sexual" te falta algo (por ejemplo: mitad del, pleno); se agrega punto y aparte donde sea necesario (como entre "severo" y "parte"); no se dejan sueltas frases sin sentido (como "parte de esta informan medios brasileños").
Si yo tuviera que pagar 600.000 euros, tendría varias opciones:
a) Fugarme del país y cambiar de identidad.
b) Quedarme sentado y esperar que la Guardia Civil viniera a por mí.
c) Pedir dos céntimos a cada español, al más puro estilo Lola Flores.
Si yo tuviera 600.000 euros, no sería tan gilipollas como para arriesgarlos para tener unos cuantos más. Disfrutaría de ellos y de la vida que se me ofrecería gracias a ellos.
#1 Tristemente, mucha gente piensa así. Incluso una profesora de instituto que tuve (en BUP) hace muchos años, muy tiesa ella y repipi, lo iba diciendo a quien quisiera escucharla (y a quien no, también). Es que ella era así, como muy exquisita y sofisticada. O sea.